MIRANDÉS 1 ALBACETE 1
Hay que creer en este equipo. Hay que creer tanto en el como creyeron ellos en que podían conseguir puntuar en Anduva. Lo que hizo el Alba en tierras burgalesas fue un ejercicio de fe y coraje. Toda la fe y el coraje que, a buen seguro, va a tener a lo largo de la temporada.
Los blancos empataron a un gol en Miranda de Ebro y lograron un punto muy importante. Además, la moral,tras lograr puntuar de la manera que se hizo, crece enormemente para los jugadores manchegos.
Fueron varios palos los que superaron los de Luis César. Primero el gol de Lago Junior en el minuto 14 y después la expulsión del Héctor ( el Alba viajó a Miranda con los porteros del filial por las lesiones de Dorronsoro y Juan Carlos) que acabó en penalti.
Pero como el fútbol tiene magia y hace, a veces, que se cumplan los sueños, ese penalti lanzado por Ruper lo detuvo Hugo, el cuarto meta del Alba. No podía debutar de mejor manera.
Acabó la primera parte con un gol a cero a favor de los locales y con todo un segundo acto por delante que afrontar en inferioridad numérica. Tras lo visto en los primeros 45 minutos en los que el Mirandés fue mejor y con un hombre menos, pocos creerían que los albaceteños iban a empatar el choque.
La segunda parte, aunque hubo algún susto local, fue para el Alba. Dispuso de ocasiones para igualar la contienda antes del minuto mágico, el 94, en el que Portu, que ya lleva tres goles en el terreno de juego rojillo, empató el partido.
Delirio visitante al final del encuentro e inyección de moral para los próximos compromisos. Gracias a todos por vuestro apoyo y ya sabéis, creer siempre en vuestro equipo.
