El Alba de López Garai tuvo una magnífica puesta de largo hoy en el Belmonte. El cuadro manchego logró de una tacada su primera victoria del curso, su primera gran actuación en el Carlos Belmonte y su primera puerta a cero de la temporada.
El partido empezó de forma enérgica. Ambas escuadras intentaron llevar la batuta del juego y hacerse con el dominio del balón. Los nuestros trenzaban posesiones y buscaban hacerse fuertes en el medio para tener superioridad en la banda y así lograr posiciones ventajosas de cara a puerta. Las dos primeras ocasiones locales llegaron por mediación de Caballo, que con sendos disparos desde fuera el área probó al meta arlequinado.
Pasaban los minutos y los equipos se asentaban sobre el césped albaceteño. Los catalanes también se acercaron a los dominios de Tomeu, pero entre la defensa blanca y un inspirado meta balear, que fue providencial a la media hora de partido con una gran intervención, desbarataron las acometidas foráneas.
El Alba respondió a esa acción con bravura. En el minuto 33 Kecojevic cabeceó una falta lateral que repelió el portero del Sabadell, pero arroyo fue el más listo de la clase y empujó el rechace hacia la portería. El primer gol de la era López Garai lo anotaba un jugador con 148 partidos como albacetista a sus espaldas.
El segundo acto empezó explosivo para el Albacete. Cuando solo habían pasado seis minutos desde la reanudación, Álvaro Peña culminó con un certero disparo una contra conducida por Álvaro Jiménez y Fuster. Ese gol no sació a los nuestros que siguieron buscando el arco visitante. En el minuto 60, de nuevo Jiménez y Fuster hicieron de las suyas. El cordobés robó la bola y asistió al espacio al ‘8’ que se internó en el área y fue derribado. El penalti lo transformó con seguridad Roman Zozulia.
Tras el tercer tanto, el equipo local introdujo varios cambios y mantuvo la intensidad para así sellar un triunfo balsámico con el que tomar impulso en la clasificación y en la competición.
