Skip to main content

El Alba es un liante

Sumó en el 500º partido a domicilio de plata para asegurarse luchar por el oro

La última vez que el Albacete visitó Ponferrada era uno de los últimos trenes para evitar el descenso de categoría. Y el campo estaba vacío por la pandemia. Venció por primera vez en su historia en El Toralín. Pero no supo como una victoria normal porque, pese a todo, el objetivo parecía inalcanzable. Y así fue.

Hoy volvió el Alba a El Bierzo. Era un tren para atar una plaza de ascenso a la máxima categoría. En el campo había cientos de albacetistas que no pararon de cantar y transmitir buen rollo. Y el Alba no ganó. Empató. Pero cómo supo.

Y lo hizo mereciendo más. Porque este Alba no desmerece a nadie y así se ha merecido lo que tiene. Salió con todo. Sin arnés y con la mirada fija en la meta local, libre de la tentación de echar el ojo a otros campos. Controlando y tocando, fue llegando. 

Minuto a minuto se hacía el protagonista en la tierra de Luis Del Olmo, porque es la forma en la que sabe jugar, más allá del esquema. En el minuto 14 Boyomo, expeditivo en área propia y elegante en la ajena, controló la bola tras un balón parado y cedió hábilmente para Escriche. El ‘21’ golpeó según le llegó para hacer imposible la estirada del portero local.

Escriche, diferencial en ataque, asistió la semana pasada y anota en esta. 0-1 y billete sacado a falta de unos pocos céntimos. Según transcurrió el encuentro se hizo más patente el dominio manchego, que con todo no se pudo traducir en más ventaja. 

La segunda parte empezó algo más espesa, con más igualdad y el cuadro local llegando con más frecuencia. Pasada la hora de partido, una acción en el área de Altube culminó en penalti. Varios minutos de debate en el VAR después, Yuri lo lanzó y marcó para empatar. Ese gol no solo no dañó al Alba sino que lo revitalizó. No cabrían las narraciones de cada acción de peligro visitante en el último tramo. Fran Álvarez, Bolívar, Isaac, Djetei y un largo etcétera obligaron al meta local a lucirse.

Pero, al final del partido, lo que más brilló fue el billete de play off de ascenso. Un premio que pone la temporada blanca de relieve. Un hito que no sacia a este plantel ni a esta afición.