Últimamente los partidos del Alba se tienen que contar por fascículos y relatar, ante alguien que no lo haya visto, pidiendo un acto de fe para que se lo crea. Porque pasa de todo. En todas partes.
El Alba empató un partido que estuvo cerca de ganar y cerca de perder. Porque así es el fútbol, esta categoría y este Albacete.
Un equipo que se adelantó muy pronto. En el minuto 2, Pablo entró con electricidad en el área y se sacó un gran disparo raso al palo corto. Firme. Sin florituras. Para dentro.
Poco duro la ventaja del cuadro manchego. Tras una revisión de VAR, el Castellón tuvo un penalti a favor que transformó Suero. Empate y vuelta a empezar en un partido que desde su comienzo aseguraba emociones fuertes.
El Alba intentó rehacerse, aprovechar sus contras mediante la circulación de balón para así adelantarse de nuevo. Y lo hizo en el minuto 38. Kofane, tan luchador y atinado como desde su meteórica irrupción, cazó un gran centro lateral de Jaume Costa. Gol y a celebrarlo a la repleta grada visitante.
La segunda mitad empezó con cambios en ambos bandos. Higinio y Javi Villar entraron en juego y el CD Castellón apretando para igualar.
El conjunto orellut se volcó, llegó al área y tuvo grandes ocasiones. El Alba, desde su flanco, estuvo cerca de doblar la ventaja con muy buenas oportunidades de Pacheco o Higinio Marín.
En el minuto 83, el Castellón empató entre un torrente de lluvia. De ahí al final el cuadro local marcó aunque fue anulado y el final se hizo de rogar por varios chequeos del VAR.
Con todo, por todo, el partido acabó en tablas y el Alba, tras sumar diez de los últimos doce puntos, alcanza los 47 en la tabla.












































