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Primer equipo

El Alba mereció más incluso estando con menos

Los de Albés empataron un partido cuya actuación encandiló a la afición albacetista

En su regreso a casa como equipo profesional, el Albacete tuvo dos buenas noticias: una fácil de ver y otra más recóndita pero igual o más satisfactoria. La primera, que ha alargado las magníficas sensaciones de forma y fondo que dejó el debut liguero. Y la segunda, que se va con sensación agridulce tras puntuar. Y eso se debe a su ambición y a que siempre marcó el ritmo del partido.

La victoria se quedó en mitad de la balanza, pero durante todo el choque el peso lo llevó nuestro equipo. Capacitados y animados, pero que muy animados gracias a la afición, los blancos salieron a por todas y sin guardarse nada. Tras unos primeros momentos un poco trabados, con amonestaciones incluidas, el Albacete fue volcando la acción sobre el arco de Caro, que se hizo grande en todas las llegadas albacetistas, algunas de ellas muy claras. De hecho, poco antes del descanso rozó las ventaja con una ocasión de Higinio, que hizo las delicias de la grada con su pundonor.

El segundo acto fue más y mejor. Las llegadas eran más frecuentes y las ocasiones, más claras. Riki Rodríguez y Lander movían el medio con fluidez. Los atacantes se movían bien al espacio sin balón y se erigieron protagonistas con él. Mesa, Fuster, Rubén Martínez, de nuevo inasequible al desaliento, o Higinio rozaron el gol, que le fue negado hasta por el travesaño rival.

Ese hambre no cambió ni siquiera cuando se le anudó el estomago tras la expulsión. Julio Alonso se tuvo que marchar antes de tiempo a vestuarios. Ese revés no inquietó a los nuestros. Juanma y Juan María entraron para debutar en partido oficial de blanco y ayudaron a mantener, como Dubasin, el buen tono coral.

De hecho, se puede decir que no se notó si el Albacete estaba con 10 o con 11. Pero como los números cuentan, el Alba acabó con un jugador menos, su puerta a cero, un punto y la sensación de merecer dos más. El viernes, nueva oportunidad para que equipo y afición sigan remando juntos.