Andreu Arasa ha sido quien ha visto hoy por primera vez el Carlos Belmonte. Una sensación que facilitó la amplia sonrisa con la que se mantuvo durante una presentación en la que Alfonso Serrano volvió a ejercer de maestro de ceremonias. “Estoy feliz y contento de estar en un club tan histórico como el Albacete”, empezó diciendo un futbolista que entrenará a partir de ahora en la Ciudad Deportiva que lleva por nombre el de su ídolo futbolístico. “Cuando me llamó el Alba todo fue muy rápido. No me lo pensé mucho. Tenía diferentes ofertas, pero cuando me dijeron que estaba la opción del Alba no me lo pensé mucho. Es un club histórico, que, aunque haya descendido, pronto volverá al fútbol profesional. Me hacía mucha ilusión. Es el equipo de mi ídolo, Andrés Iniesta. Y eso me ha tirado mucho”.
Arasa llega al club tras haber sobresalido en un Atlético Sanluqueño que no pasó desapercibido en la categoría. “El año pasado era uno de los más importantes para mí después de haber salido del Mallorca, de donde me fui tocado porque no había jugado mucho. Fue todo muy rápido. Esta temporada pasada, las cosas se han dado con mucho trabajo. El entrenador confío en mí. Me han salido bien las cosas y la temporada. Estoy contento porque un jugador necesita confianza y a mí me faltaba. Y este año la encontré y me encontré muy cómodo y eso me ayudó a progresar y a estar aquí”, comentó antes de describir las cualidades que habían conducido al Alba a firmarlo. “Durante mi carrera he jugado en bastantes posiciones, pero donde más cómodo me encuentro es en el extremo izquierdo, ahí he jugado esta temporada”, indicó. “Como jugador me definiría como un futbolista de mucho trabajo tanto en ataque como en defensa y que es rápido, veloz y tiene desborde. Me gusta la banda, pero también buscar el juego interior”, agregó.
A la hora de valorar sus objetivos en esta nueva etapa, explicó: “Me tomo el Alba como un reto a batir. Un reto importante como es el de ayudar al club para que vuelva rápido al fútbol profesional. No es presión ninguna, es bonito estar en un club así y tener la oportunidad de demostrar en un club así lo que se puede dar”. Y se sumó al objetivo del día a día. “Mi objetivo es el día a día. Marcarnos objetivos a largo plazo es complicado. Cada partido es un mundo, cada semana será diferente”, argumentó. “Mi principal objetivo es empezar la pretemporada y conocernos plantilla, cuerpo técnico y la forma de funcionar del Club. Y a partir de ahí marcarnos nuestros objetivos cada día, aquellos que creamos convenientes. Yo quiero a nivel individual ganarme la confianza del mister y a nivel grupal hacer la mejor temporada posible”.
Y acabó nuestro nuevo jugador refiriéndose a esta nueva categoría, la Primera RFEF. “Va a ser una categoría ilusionante e importante. Solo hay que ver los equipos que hay. Será una competición bonita y para disfrutarla”.