Si hace un mes, o cinco semanas para ser más precisos, hubiésemos calculado qué era más probable que ocurriera durante el tercer fin de semana de mayo: que el Albacete Balompié tuviera la opción real de salvarse con un mero empate o que un meteorito atravesase la Península Ibérica dejando tras de sí un cegador halo, todo el mundo diría, sin dudar, que lo segundo.
Pero en la Liga Hypertensiones, y especialmente en el Albacete Balompié, todo es posible a la vez que improbable. Han pasado ambas cosas, y en ambas situaciones todo el que lo ha visto se ha quedado perplejo. Una racha histórica, literalmente, y un equipo con la autoestima por las nubes facilitaron al cuadro manchego pasar como una exhalación, como un meteorito incandescente, desde la parte más baja de la tabla al decimocuarto puesto en poco más de un mes.
Ahora, así en el cielo como en la tierra, el Alba avista su particular OVNI - Objetivo Vital Nítidamente Identificado - que puede aterrizar en La Cerámica. Y es que en ese campo juega hoy el equipo de Alberto González desde las 20:30h para cerrar la 40º jornada de LaLiga Hypermotion ante el filial amarillo.
El duelo será vital para el equipo local, que necesita ganar para aumentar sus opciones de permanencia. Con 39 puntos y en la 22º plaza de la tabla, esta tarde saldrá a por todas el segundo equipo del submarino, que viene de perder a domicilio en Lezama (2-0)
El Alba, ya a flote, aún ha de tocar tierra firme entre tantas aguas turbulentas. El buen caudal de estas semanas le permite depender de sí mismo, necesitando un punto para sellarlo del todo.
Y a por ello va con todo y con todos. Toda la plantilla se ha trasladado a la Comunidad Valenciana y más de 600 aficionados han comprado su billete para una tarde que, aunque en lunes, invita a apoyar al Albacete tras tantos viajes en masa.
Y quizá ver otro día para los libros de historia. Porque si nunca, hasta esta temporada, se habían visto cinco victorias seguidas en fútbol profesional, seis ni se habían imaginado. Pero es una posibilidad real. Y especial. Porque no solo sería la sexta, sino la que certificaría, con sello de Denominación de Origen, otro año más en plata.
