Tras encontrar el camino del triunfo, ahora la brújula apunta al norte. En un clima otoñal, para despedir septiembre, el Albacete viaja para demostrar que sigue en el rumbo correcto. Y nada mejor para reencontrase a sí mismo que un estadio con enjundia y un rival con solera. Desde las 18:30h, el Albacete juega en El Molinón - Enrique Castro ‘Quini’ ante el Real Sporting de Gijón uno de los choques más impactantes de la séptima jornada de LALIGA Hypermotion.
Porque el cuadro rojiblanco tiene motivos para salir a por todas más allá de los rutinarios acicates de sumar tres puntos y brindar un triunfo a su hinchada. Después de un inicio eléctrico y fulgurante, en el que hizo pleno en las tres primeras jornadas con un sólido 9 de 9, el cuadro de Garitano ha perdido los tres partidos siguientes, aunque pese a las derrotas en esas tres últimas semanas, el equipo gijonés ha seguido demostrando notables dones, con jugadores desequilibrantes y un esquema claro.
A eso se enfrente un Albacete que llega en línea ascendente y quiere seguir haciendo crecer las estadísticas. El primer triunfo de la temporada (2-0 vs Real Valladolid) vino acompañado de la segunda puerta a cero del curso, siguiendo con la mejoría en el plano defensivo ya mostrada en Zaragoza. Ahora toca continuar por ese camino en medio de un estadio incómodo para el rival y un equipo duro para el contrincante.
Y no lo hará solo. En Asturias, a cientos y cientos de kilómetros, también habrá afición manchega. Porque el Alba, vaya donde vaya, va acompañado.