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Primer equipo

Los postes evitan el triunfo de un buen Alba

El cuadro de Lucas Alcaraz dominó y mereció ganar en Anduva

El Alba dio claros síntomas de mejoría y de control en un empate que por fútbol y ocasiones supo a poco, pero que denota que el equipo goza de herramientas y posibilidades más que de sobra para lograr el objetivo. Solo la madera, con dos disparos a los postes, evitó que el cuadro manchego se volviese de Anduva con un botín mayor.

Los visitantes salieron enérgicos y proactivos, empujando desde el inicio, presionando la salida de balón rival y buscando espacios desde el centro del campo. Varias fueron las aproximaciones al área rojilla, pero el gol llegó desde fuera del área, y qué gol. En el minuto 14, Manu Fuster templó con el pecho el cuero, lo guio para Dani Ojeda, que llegaba en carrera y de cara, y el atacante albacetista se sacó un golpeo de categoría. El balón entró como una exhalación en la meta de Limones, besando la parte interior de su poste derecho.

El CD Mirandés empató diez minutos después por mediación de Barco, que culminó una contra local. Ese gol no mermó a nuestro equipo, que siguió batallando y trenzando jugadas de ataque, pero la gran ocasión no llegó hasta la última acción del primer acto. Tras una triangulación, Diego Caballo disparó al arco, y cuando ya se cantaba el gol, la madera repelió el cuero. El rechace lo empujó Fuster, aunque Limones despejó el peligro en línea de gol. Ocasión clarísima que no solo servía de finalización, sino también de resumen de la primera parte.

La segunda parte empezó trabada y bronca. Ninguno de los dos equipos se asentaba sobre el tapete. Llegada la hora de partido, el Alba sufrió un revés con la expulsión por roja directa de Diego Caballo. Los de Alcaraz mostraron personalidad y en ningún momento pareció que estuviesen en inferioridad numérica, hecho que se volatilizó en el minuto 76, cuando André fue expulsado tras un plantillazo sobre Caro.

En los últimos instantes el Alba fue a por el triunfo sin complejos, a cara descubierta. Con Querol quedándose con balones en el ataque y generando faltas. Y casi llega ese tanto. Primero con una falta peligrosa que botó Pedro y después con un nuevo disparo al poste. Muy cerca anduvo Erice de marcar, pero su cabezazo se estrelló en el larguero.

Empate que sabe a poco pero actuación que deja un gran sabor de boca en un equipo que ahora vuelve a casa para intentar ganar ante su público el próximo sábado.