Nuevo reto de líder. Nueva respuesta rotunda del Funda. Con un sabor agridulce tras quedarse con la miel del triunfo en los labios, el cuadro manchego volvió a dejar un gran sabor de boca entre su parroquia con una actuación convincente de principio a fin ante uno de los equipos más potentes de la categoría.
La SD Eibar, que no conoce este curso la derrota como visitante, vio cómo las locales tejían jugadas, se hacían con el control y llegaban a puerta. Aunque la primera intentona fue blaugrana, a los pocos segundos del inicio, con un disparo que repelió el larguero.
Con todo, el Fundación no temió a las vascas y miró la puerta local, a la que llegó en repetidas ocasiones hasta que en el minuto 25, Riu se quedó con la escena. Marcar al equipo menos goleado es un trabajo arduo, que exige precisión. Y vaya si la tuvo la catalana. La atacante agarró el cuero, sujetó el cartabón y, desde fuera del área, lo puso en la escuadra.
Golazo de una jugadora y un equipo que hizo méritos y que logró sostener la ventaja hasta el ecuador.
Tras el regreso de vestuarios, la presión armera se hizo más palpable, aunque Hoyas y la defensa desbarataron sus intentos. Pero en el minuto 65, un gran golpeo desde las inmediaciones del área acabó en las redes locales. Empate y el Funda que se vio obligado a seguir empujando y remando.
Y lo hizo con músculo y garra. Y con ocasiones. Elena Martínez, que fue parte del carrusel de cambios del segundo acto, estuvo muy cerca de anotar, pero el marcador no se movió más.
Punto que sirve para sacar algo positivo de una semana tremendamente exigente.
